sábado, 11 de febrero de 2012

Venecia congelada ... . Y El Danubio también ... . René Descartes, 11 de Febrero 1649, murío " de frío". "De omnibus dubitandum"

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Publica y difunde: NTC …* Nos Topamos Con
* Se actualiza periódicamente. Febrero 11, 2012

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Al final sigue en la página 2

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Venecia congelada ... . 

Y El Danubio también ...


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"Puede haber Poesía en una rayuela,
en un jingle,
en una conversación de dos hombres
o en los garabatos que traza una luciérnaga."
Julio César Londoño
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Allí otras fotos. 
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http://www.giurfa.com/clima.pdf (Cambio climático) 
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Publica y difunde: NTC …Nos Topamos Con 
* Se actualiza periódicamente. Febrero 11, 2012
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De: Carlos Vidales
Fecha: ESTOCOLMO,  11 de febrero de 2012,  08:30
Asunto: Recordatorio
Para: NTC …* Nos Topamos Con … http://ntcblog.blogspot.com * , ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia.



Esta ola de frío europeo me ha hecho recordar que hoy, 11 de febrero, se cumple otro aniversario de la muerte del filósofo racionalista René Descartes.

Había llegado a Estocolmo en octubre de 1649. Tenía entonces 53 años. Allí, la reina Cristina, de 22 años, lo obligaba a levantarse a darle sus lecciones de filosofía a las cinco de la mañana, paseando por el congelado jardín. Pero Descartes no pudo resistir el invierno sueco. El 1 de febrero de 1650, a las 5:00 am, el filósofo entregó a la joven reina los Estatutos de la Academia Sueca de Artes y Ciencias, que él había redactado, y en ese mismo momento contrajo un resfrío que pronto se convirtió en neumonía. Murió el 11 de febrero, un día helado como hoy. A él debemos el principio esencial de todo método científico, que habría de ser el lema favorito de Marx: "De omnibus dubitandum", dudar de todo.

Según el testimonio de su valet, Descartes cayó en coma desde el primer día de su resfrío y murió sin haber pronunciado una sola palabra. Años antes había dicho: "Pienso, luego existo". Y al llegar a Estocolmo había opinado: "En el invierno de Suecia se congelan las ideas como se congela el agua". Con las ideas paralizadas por el frío nórdico dejó, pues, de pensar, luego dejó de existir.

En Francia, rugían todavía los vientos de La Fronda.

Saludos con frío pero cálidos.

Estoy congelado, luego existo.

Carlos Vidales


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Carlos Vidales



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NTC ... ENLACES: 
Fragmento del retrato de René Desartes por Frans Hals. Fuente: Wikimedia commons
http://es.wikipedia.org/wiki/Ren%C3%A9_Descartes

En septiembre de 1649, la Reina Cristina de Suecia llamó a Descartes a Estocolmo. Allí murió de una neumonía el 11 de febrero de 1650, a los 53 años de edad. Actualmente se pone en duda si la causa de su muerte fue la neumonía. En 1980, el historiador y médico alemán Eike Pies halló en la Universidad de Leiden una carta secreta del médico de la corte que atendió a Descartes, el holandés Johan Van Wullen, en la que describía al detalle su agonía. Curiosamente, los síntomas presentados —náuseas, vómitos, escalofríos— no eran propios de una neumonía. Tras consultar a varios patólogos, Pies concluyó en su libro El homicidio de Descartes, documentos, indicios, pruebas, que la muerte se debía a envenenamiento por arsénico. La carta secreta fue enviada a un antepasado del escritor, el holandés Willem Pies.
En el año de 1676 se exhumaron los restos de Descartes; colocados en un ataúd de cobre se trasladaron a París para ser sepultados en la iglesia de Sainte-Geneviève-du-Mont. Movidos nuevamente durante el transcurso de la Revolución francesa, los restos fueron colocados en el Panthéon, la basílica dedicada a los grandes hombres de la nación francesa. Nuevamente, en 1819, los restos de René Descartes cambiaron de sitio de reposo y fueron llevados esta vez a la Iglesia de Saint-Germain-des-Prés, donde se encuentran en la actualidad.
En 1935, se llamó en su honor a «Descartes», un cráter lunar.12
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Un investigador afirma que Descartes no murió de pulmonía, sino envenenado
EL PAIS, Madrid 19 JUL 1996
http://elpais.com/diario/1996/07/19/cultura/837727207_850215.html
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El investigador alemán Eike Pies asegura haber encontrado en una carta la prueba del asesinato del filósofo creador de la duda metódica y así lo expone en un libro, aparecido en Alemania, bajo el título El asesinato de Descartes: Documentos. Indicios. Pruebas.Pies recuerda que el filósofo murió en Suecia, donde se encontraba en la corte de la reina Cristina, quien tuvo que renunciar al trono por sus intenciones de convertirse al catolicismo. Y explica que por casualidad encontró en la Universidad de Leiden, en Holanda, una carta del médico de la reina de Suecia a un colega en la que se relataban los síntomas presentados por el filósofo en el momento de su muerte: hemorragias estomacales y vómito negro. Estos no son síntomas de pulmonía, causa oficial de la muerte, sino de envenenamiento por arsénico. ... 
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Der Mordfall Descartes
Dokumente, Indizien, Beweise
Auteur
PIES, Eike
ISBN
9783930132058 (3930132052)
Jaar 1996
Bladzijden 149 pp.

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SOBRE D.E.: 

HONORES AL FILOSOFO DESCARTES – 11 de Febrero de 1650

http://ithinksearch.wordpress.com/2010/02/10/414-anos-de-descartes-11-de-febrero-2010/
VIDEOS
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http://www.youtube.com/watch?v=tLt1NoVfaUU 1 a 15 Película italiana "CARTESIUS "
http://www.youtube.com/watch?NR=1&feature=endscreen&v=z9Veu6w8gTo 15 de 15
http://scalisto.blogspot.com/2011/08/roberto-rossellini-cartesius-1974.html
http://www.filmaffinity.com/es/film366505.html

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El 12 de febrero de 2012 02:46, NTC <ntcgra@gmail.com> escribió:

Gracias "congelado" Maestro: 
Muy oportuno y valioso tu comentario. Ya lo eneteceamos en:

Venecia congelada ... . Y El Danubio también ... . René Descartes, 11 de Febrero 1649, murío " de frío". "De omnibus dubitandum"

http://ntc-documentos.blogspot.com/2012_02_11_archive.html


El lúcido René D. ¿murió de frío? ¿O de arsénico? ... ¿El homicidio de Descartes, documentos, indicios, pruebas. , del historiador y médico alemán Eike Pies?  (ver blog) 
Der Mordfall Descartes

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---------- Mensaje reenviado ----------
De: Carlos Vidales 
Fecha: 11 de febrero de 2012 23:08
Asunto: Re: El lúcido René D. ¿murió de frío? ¿O de arsénico? .... Re: Recordatorio
Para: NTC


Queridos NTC, adláteres y cómplices.

De omnibus dubitandum. Dudar de todo. En los tiempos bárbaros y rústicos de la Suecia precartesiana (siglo XVII) pudo suceder que Descartes fuera envenenado por un monje agustino, benedictino o cisterciense, pues las intrigas palaciegas eran muchas y severas, siniestras y terroríficas. La reina Cristina quería convertirse al catolicismo, lo que la obligaría, como en efecto ocurrió, a abdicar del trono y la corona. Algunos querían impedirlo, otros querían garantizarlo. Tenemos, pues, móviles suficientes para matar al racionalista que quería enseñar filosofía racional a la sardinita Cristina. Es verdad que Descartes sostenía que la existencia de Dios y la supremacía de la iglesia se podían demostrar racionalmente y que, por lo tanto, ergo, en asuntos teológicos era un fuerte aliado de la iglesia. Pero como ahora es tan importante escribir libros misteriosos como "El Código da Vinci",  "El Código Descartes", "El Código Erasmo", "El secreto de los Nule", etc., para ganar dinero a costa de la razón, pues vaya y pase, lo asesinaron, lo mataron, lo envenenaron.

La teoría del arsénico es interesante. ¿No fue con arsénico que nosotros los colombianos envenenamos a nuestro ínclito Padre y Libertador? Tal vez ocurra que el maldito general Santander envenara a Descartes dos siglos antes de nacer. El arsénico, queridos adláteres y cómplices, se usaba en aquellos tiempos ignaros para todo. Infecciones, malestares estomacales, impotencia, sarna, carranchín site luchas, alergia, lepra, insomnio, angustia, depresión, lo que fuera, se combatía con arsénico. Descartes tomaba media botella de vino tinto por día, lo que incluye de por sí mucho arsénico. Una vez que se le declaró la neumonía, bien pudo un monje benedictino, un médico alemán o el tatarabuelo de mi general Santander recomendar arsénico como tratamiento, con buena o mala intención. Todo es posible, todo cabe, de omnibus dubitandum, dudar de todo.

Pero "dudar de todo" exige un método, porque de otra manera nos volvemos locos de remate. Y el método exige pensar. Y para pensar hay que alejarse de los charlatanes de feria y los escribidores de libros truculentos. 

¿Quién perseguía a Descartes? La Fronda francesa y los protestantes holandeses y alemanes. Ellos querían verlo muerto porque él era racionalista (pecado para los ultragodos de la Fronda) y porque había escrito libros en pro de la Iglesia (pecado para los enemigos de Roma). La invitación de la sardinita Cristina a visitar Suecia era una invitación católica, bien vista por el Papa. Así pues, pensando y razonando racionalmente a lo Descartes y a lo Sherlock Holmes, tenemos dos posibles asesinos. ¿La nobleza sueca? De ninguna manera, porque esa nobleza putrefacta quería que la sardina Cristina abdicara del trono y se fuera a rezar novenas a Roma. No querían una reina, querían un rey, un macho, un patriarca. Descartes les estaba haciendo un favor al abrir al camino para la conversión católica de la sardina Cristina.

¿Existe una remota posibilidad de que, en efecto, mi amigo René contrajera una neumonía? Toda su historia clínica muestra que esta es la posibilidad más segura. Siempre tuvo el pecho angosto y enfermizo, débil y sujeto a múltiples bronquitis y laringitis (lo mismo que Bolívar, para que no le demos más vueltas a este asunto).

¿Existe la posibilidad de que, una vez enfermo, algún asesino santanderista aprovechara la ocasión para aumentar la dosis de arsénico que los médicos cretinos recetaban por doquier en aquellos tiempos bárbaros? Claro que sí. ¿Y qué diablos importa?

Lo que importa es que, después de tres siglos y medio, todavía hay gente que no se ha tomado el trabajo de leer, y menos entender, lo que dicen los libracos de Descartes. Ese es el verdadero asesinato. Miramos la tele para saber si mañana lloverá y no sabemos que mi amigo René sentó las bases de la meteorología moderna. Tomamos un remedio para curarnos de un resfrío, o nos zampamos diez píldoras de Viagra para descrestar a la vieja que nos acompaña, pero ignoramos que esas cositas se han logrado gracias al método científico de la duda metódica, la prueba y la corrección del error. El método cartesiano.

¿Qué es lo importante, al fin y al cabo? Que su vida acabó como consecuencia de una oscura intriga, o que su vida y su obra nos ha dado tantas cosas esenciales que nuestra mente debe tratar de entender y aprender?

Yo, que vivo en Suecia desde hace más de treinta años, creo que se enfermó como se enferma cada cabeza negra, diez veces, cuando llega el invierno a este gélido país. Si después de eso, algún cretino le puso una sobredosis de arsénico en la changua, pues vaya por la cretinada. Desperdicio de arsénico. Aquí, para morirse, basta con que un médico le dé a uno una receta. Yo huyo de los médicos suecos cada vez que me resfrío y he logrado sobrevivir con éxito y un poco de suerte.

Mientras tanto, siempre habrá vivos que se hacen millonarios escribiendo libros truculentos. Que a Mozart lo asesinó Salieri (cuando está clínicamente probado que murió de triquinosis, porque se comía unas chuletas de cerdo crudas dos o tres veces por día), que Cervantes acuchilló a un pretendiente de su sobrina, al amparo de las sombras, una tenebrosa noche madrileña, o que al señor Aznar se le ocurrió una idea un día que orinaba sobre la foto de Sadam Hussein...

Dejemos esas cosas para la gente ignorante. Ocupemos nuestro tiempo en la discusión y el aprendizaje de las cosas que sirven para construir un buen futuro para la humanidad: ideas, conceptos, verdades profundas, perspectivas existenciales.

Cuando yo sea presidente de Colombia (en otra vida, porque en ésta ya es tarde), ordenaré que se baje a todos los próceres, ídolos y "héroes" de sus malditos pedestales; que se estudien y se entiendan sus dichos y hechos, y que la gente vea y discuta si valen de algo o no. Prohibiré expresamente que se hagan mausoleos con catafalcos de oro y piedras preciosas, no importa en honor de quién, porque esos artefactos son una afrenta a la razón, a la duda metódica y a la dignidad de los ciudadanos. Ya verán todos cómo, a corto plazo, comenzamos a ser gente.

Saludos cartesianos.

Carlos

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De: Carlos Vidales 
Fecha: 12 de febrero de 2012 06:15
Asunto: Más Descartes, más duda metódica, más arsénico
Para: NTC , Gabo Ruiz , Yves MONINO 

Aquí el enlace a una sobria presentación sobre la vida de mi amigo René. Incluye lo esencial del texto médico que ha inspirado las sospechas de envenenamiento con arsénico.


Mi comentario: todo es posible, de omnibus dibutandum.

Dada la débil constitución de Descartes (más débil que la constitución colombiana) no es imposible tampoco una extensión de la infección pulmonar a la región abdominal, con las fatales consecuencias de una peritonitis. Es un síntoma muy notable el hecho de que se negó a probar alimentos o bebidas entre el 1 y el 11 de febrero (los últimos diez días de su vida). Lo que, de por sí, es mortal.

Algunas de las versiones más truculentas sobre un posible envenenamiento del filósofo, hablan de que, al repatriar sus restos a Francia, se vio que su rostro estaba totalmente destrozado e irreconocible (¿¿¿!!!???), o que su cráneo había sido robado y que jamás se ha recuperado (¿¿¿!!!???). Estas versiones solamente muestran la paranoia conspirativa de sus autores. En realidad, la cabeza* de Descartes fue separada de su cuerpo por un oficial sueco que deseaba conservarla como reliquia. Años más tarde, sus herederos la devolvieron al estado francés y ahora se encuentra expuesta en el Museo del Hombre, en París. Es notable el mal estado de la dentadura, lo que era muy común en la época en que vivió mi amigo René.

Omito otros detalles del asunto porque (de omnibus dubitandum) dudo de todo.

Aplico aquí, con la debida duda, la sentencia cartesiana: "Sin evidencia no hay verdad".

Saludos.


Carlos Vidales

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* NTC ... Enlaces: 
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10 DE OCTUBRE DE 2007


La misteriosa muerte de Descartes y su viajero cráneo



Cráneo de Descartes en el Musée de L'Homme en París
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¿Un filósofo aesinado?

Por pura coincidencia, el científico alemán Eike Pies (izquierda) dio con la evidencia del envenenamiento y muerte de Descartes; el cráneo del filósofo puede contener pruebas.

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RETRATOS DE LA HISTORIA

La cabeza de Descartes

11/10 · 11:48 · José María Deira

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Descartes' Bones by Russell Shorto (video) 


Fuente: 
Pagina 5: 

El escritor norteamericano Russell Shorto escribió hace poco un libro titulado: “Descartes’s
bones” (Los huesos de Descartes), en donde documenta y narra adonde fueron a parar los
restos del gran filósofo.
En http://www.youtube.com/watch?v=Y6WQUEDucuA se puede ver una presentación en inglés y ahí mismo se pueden observar unas tomas del museo en donde está el supuesto cráneo.
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Sigue en la página 2


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